Virtual Pilgrimage 2021: Pie de la Cuesta a Copales – La Cuesta to Copales
Hills on back side of la Cuesta
Te y quesadillas
Grupo unido, a fun group
La Cuesta a Copales
Levantarme esta mañana a las 3:30 de la mañana no fue tan difícil como parece. No fui el primero en levantarme mientras otros estaban desmontando sus tiendas y preparándose para comenzar. Como les advertí, la Cuesta (La Costa) merece su nombre. El primer año que fui a Talpa, tenía plan de caminar regular y parar cuando necesario, pero esto es una escalada en lugar de una caminata. En Estados Unidos, esta pendiente empinada tendrá un camino con veinte o treinta curvas, pero en México hay menos de diez. El sendero tiene solo una milla y media, pero asciende más de dos mil pies. Mi segundo año decidí caminar muy despacio, con menos paradas. Comencé mi ascenso y al cabo de media hora varios jóvenes me pasaron riendo de mi paso lento. Unos veinte minutos después, los alcancé mientras descansaban. Los pasé y cinco minutos ellos me pasaron. Quince minutos más y los pasé. Unos minutos después me pasaron otra vez. Diez minutos después, los atrapé y uno de ellos dijo: “Será mejor que lo sigamos, porque va a estar en la cima de la colina antes que nosotros”.
Incluso a un ritmo lento, se tarda más de una hora en recorrer una milla y media. El amanecer en la cima de la Cuesta merece el esfuerzo para llegar a la cima. Los jóvenes que estaban conmigo ese segundo año me compraron una Coca-Cola de los vendedores ambulantes. Sabe muy bien en ese momento, pero molestó el estómago bajando la Cuesta. Decidí no volver a tomar una Coca-Cola en la bajada del cerro. La parte trasera de la Cuesta es un descenso empinado, pero solo desciende unos mil pies. Dos millas después de la Cuesta, hay algunas casas y los residentes venden té de canela, café y quesadillas. Mis compañeros me preguntaron si quería canela con piquete o sin piquete. La primera vez dije sin. Al día siguiente, lo probé con Rompope. La tercera vez me preguntaron si lo quería con piquete o sin piquete. Dije: “Por supuesto, con piquete”. Estas paradas también tienen jugo de naranja fresco. Nunca pasa la oportunidad de tomar jugo de naranja en México. Más sabroso que aquí.
Después de otras dos horas, nuestro grupo se acerca al pueblo de San Felipe. Es tiempo de tener almuerzo. Una vez, estaba con un grupo y una mujer dijo: “Quiero algo ligero, una quesadilla”. Otras mujeres decían: “Con fruta”. “Con frijoles”. “Con arroz.” “Con jugo.” “Con huevos y salchicha”. “Con pan dulce”. Uno de los maridos dijo: “Escuchen a las mujeres. Quieren una comida ligera, con, con, con, con y con”. Hay varias casas que venden comida a los peregrinos, y cada grupo tiene su casa favorita. Me encanta el almuerzo en San Felipe.
Antes de salir de San Felipe, se recuerda a todos que necesitan una bolsa de dulces para regalar a los niños cuando pasemos por las casas en el camino a Copales. Hay tradición de regalar dulces a los niños de esta parte del camino. Los doy a los niños una cruz redentorista. Mi último viaje, cuando me acercaba a casa, un niño corrió a su casa y salió con la cruz que le di el año anterior, recordándome como el sacerdote con la cruz.
El camino que sale de San Felipe tiene cierras y valles, pero nunca tan empinado como la Cuesta. Hay unas diez millas de San Felipe a Copales. Llegamos pasadas las 4:00 pm. Acampamos en una cancha de baloncesto. Hay duchas (frías) disponibles. Me preparo para misa y escucho confesiones hasta las 5:30. Después de la Misa, cenamos con tortas y burritos. Después descansamos bien. Mañana no es tan duro y nos levantaremos al amanecer. Nuestro próximo destino es Los Reyes.
(Mañana: Copales a Los Reyes)
La Cuesta to Copales
Getting up this morning at 3:30 am was not as difficult as it may sound. I was not the first one up as others were taking down their tents and getting ready to begin. As I warned you, the Cuesta (the Cost) deserves its name. The first year that I went on pilgrimage, I tried to take in in chunks, with a plan to stop several times, but this is a climb rather than a hike. In the U.S., this steep an incline will have a path with twenty or thirty switchbacks, but in Mexico there are less than ten. The trail is only about a mile and a half, but it ascends more than two thousand feet. My second year I decided to walk very slowly, with less stops to rest. I began my ascent and after a half hour several young pilgrims passed me laughing at my slow pace. About twenty minutes later, I caught up with them as they rested. They passed me five minutes later and caught them stopped about fifteen minutes later. I passed them and they passed me again. Ten minutes later, I caught them and one of them said, “We better follow him, because he is going to be on top of the hill before us.”
Even at a slow pace, it takes over an hour to go a mile and a half. Sunrise on the top of la Cuesta is worth the effort to get to the top. The young men with me that second year bought me a Coke from roadside vendors. It tastes great at that time, but the sloshing in the stomach on the walk down the back side of la Cuesta taught me not to have a Coke there again. The back side of la Cuesta is a steep descent, but only descending about a thousand feet. A couple miles from the summit of la Cuesta, there are a few homes, and residents are selling cinnamon tea, coffee and quesadillas. My companions asked if I wanted my tea with piquete (with a shot of Rompope). The first time asked, I said without. The next day, I tried it with Rompope. The third time I was asked if I wanted it with piquete. Now, I say, “Of course, with piquete.” These stops also have fresh squeezed orange juice. Never, pass up those selling orange juice in Mexico.
After another two hours, our group approaches the town of San Felipe. It is usually about ten am. when we approach to have a good brunch. One time, I was with a group and one woman said, “I want something light, a quesadilla.” Others said, “With fruit.” “With beans.” “With rice.” “With eggs and sausage.” “With pan dulce.” One of the husbands said, “Listen to the women. They want a light meal, with, with, with, with and with.” There are several houses welcoming pilgrims, and each group has their favorites. San Felipe is a highlight of the second day.
Before leaving San Felipe, everyone is reminded that everyone needs a bag of candies to give children when we pass houses along the way to Copales. The tradition is to give sweets to the children along this part of the pilgrimage. I have a special gift of a plastic Redemptorist cross for the children. My last trip, as I approached on home a child ran back to his house and came out wearing the cross that I gave him the year before, remembering me as the priest with the cross.
The path away from San Felipe is hilly, but never as steep as la Cuesta. It is about ten miles from San Felipe to Copales. We arrive after 4:00 pm. We camp on a basketball court. There are showers (cold) available. I set up for Mass and hear confessions until 5:30. After Mass our supper is sandwiches, and everyone goes to sleep knowing that our next day is not as long as today. Tomorrow we will get up at sunrise. Our next destination is Los Reyes.
(Tomorrow: Copales to Los Reyes)
Oh Jesús, llamaste a cuatro pescadores: “Síganme”. Nosotros los peregrinos deseamos acompañarte también. Bendice, Señor, a todos los que acogen tu llamado. Puede que el camino no sea fácil, pero tenemos la confianza de que todo es posible si caminamos contigo. Que este viaje nos abra los ojos a las maravillas de tu amor por nosotros. Oramos por toda tu gente, por todos los creyentes e incrédulos, por los líderes y seguidores. Oramos por la sanación, el perdón, la compasión, la justicia y la paz. Oramos para que, al seguirte, nosotros también podamos ser pescadores de hombres. Bendícenos en nuestro viaje.
¡Que viva la Virgen.! ¡Que viva nuestra señora de Talpa.! ¡Que viva Cristo Rey!
O Jesus, you called four fishermen, “Come after me.” We pilgrims wish to come with you also. Bless, O Lord, all who welcome your call. The path may not be easy, but we have confidence that all things are possible if we walk with you. May this journey, open our eyes to the wonders of your love for us. We pray for all your people, for all believers and unbelievers, for leaders and followers. We pray for healing, for forgiveness, for compassion, for justice, for peace. We pray that as we follow you, we too can be fishers of men. Bless us on our journey.
¡Que viva la Virgen.! ¡Que viva nuestra señora de Talpa.! ¡Que viva Cristo Rey!